Prudencia mira al futuro con fundado optimismo
Prudencia fue fundada en 1923 por el grupo Bunge & Born para asegurar las actividades de las compañías que integraban su propio conglomerado empresario. Si bien es una compañía habilitada para intervenir en todos los ramos, en el año 2002 se definió participar en nichos de negocios donde por conocimientos y posibilidades de innovación pudiera tener ventajas competitivas. Y la RC Profesional de la actividad médica fue uno de esos nichos, ya que se daba solución a la falta de aseguradoras interesadas en continuar con la suscripción del riesgo. En la actualidad, Prudencia exhibe liderazgo en los ramos en que opera con especialización e iniciativa.
Jorge Edgardo Furlan, Coordinador General de Prudencia Seguros, reflexiona sobre el presente y la proyección de la compañía.
– ¿Cuál ha sido el desarrollo y la evolución de Prudencia Seguros desde su origen en 1923 a la actualidad? ¿Qué significa tener más de 95 años de historia?
– En sus 95 años de historia Prudencia se ha caracterizado por su compromiso con el cumplimiento de las obligaciones derivadas de la suscripción de primas, así como por su adaptación a los cambios de los comportamientos de la sociedad y los económicos. Esas características le han permitido atravesar, a lo largo de décadas, diversos períodos tanto de auge como de retracción, en los que supo crecer o mantenerse, hasta llegar a la posición de hoy, en la que aprecia su futuro con fundado optimismo.
La compañía fue fundada en 1923 por el grupo Bunge & Born para asegurar las actividades de las compañías que integraban su propio conglomerado empresario. Con el correr de los años amplió su rango de actuación al incorporar a su cartera de clientes empresas ajenas al holding, actuando a través de productores independientes, con lo cual llegó a consolidar una posición de prestigio.
El mismo holding creó otra aseguradora para atender los negocios del mercado individual, integrando ambas sociedades en lo que fue conocido como Grupo Perú. Más recientemente, frente a la transformación del mercado asegurador acaecida en los años ´90, ratificó su dinamismo y capacidad de adaptación a los tiempos y desde 2002 redefinió sus objetivos y proceso comercial.
Prudencia es hoy una aseguradora autorizada a actuar en todos los ramos, pero en esta nueva etapa la decisión corporativa fue hacerlo solo en la atención de coberturas apuntadas a nichos de mercados específicos que requieren dedicación y especialización, como la RC Profesional, las coberturas de los riesgos ambientales o los seguros de caución. No obstante, no se les restó importancia a otros tipos de coberturas. Así, en la actualidad Prudencia puede exhibir liderazgo en los ramos en que opera con especialización e iniciativa.
Sin duda que con el correr de los años las concreciones de cada etapa fueron sirviendo de estímulo para los nuevos desafíos.
Como empresa mediana, es clave el desarrollo que logre a través del servicio que brinde en la suscripción, que -a diferencia de la administración de producción- requiere innovación y búsqueda permanente de nuevos nichos de mercado o de productos, y que no sacrifique la visión de futuro. Por lo tanto, en la actual estructura de la compañía se privilegió el aprovechamiento integral de los recursos, y además, que la Organización sirviera de marco para cumplir con los objetivos establecidos, y también para el desarrollo de las motivaciones personales y profesionales de sus integrantes. Buscamos también la ejemplaridad en el cumplimiento de la labor cotidiana de cada integrante.
Prudencia participa también en el capital accionario de la Reaseguradora Argentina Sociedad Anónima y, en la búsqueda de excelencia en sus prestaciones. Desde el año 2014 hasta la fecha, fue certificada a través de la Norma ISO 9001 por el Bureau Veritas.
– ¿Cuáles son los nichos de negocios en los que se consideran especialistas y cuál es el valor agregado que los diferencia en el mercado?
– Prudencia es una compañía habilitada para intervenir en todos los ramos. Pero como señalamos, en el año 2002 se definió participar en nichos de negocios donde por conocimientos y posibilidades de innovación se pudiera tener ventajas competitivas. La RC Profesional de la actividad médica fue uno de esos nichos, ya que se daba solución a la falta de aseguradoras interesadas en continuar con la suscripción del riesgo. El valor agregado fue la implementación de un programa de administración de riesgo que fue advertible por los asegurados, ya que se le daba devolución de conclusiones y aportes concretos para prevenir demandas o hechos adversos, o bien mejorar la defensa en los juicios. El otro gran nicho fue trabajar en el aporte de opinión, experiencia y soluciones técnicas que posibilitaron la implementación del seguro ambiental obligatorio. Recordemos que la obligación estaba establecida en el año 2002 a través del artículo 22 de la Ley 25675, pero no se habían considerado las necesidades normativas para hacer funcional la Ley. El gran valor agregado fue aportando las soluciones necesarias para hacer viable la aprobación del SAO, como es el caso de la intervención de los operadores para actuar en la remediación de un daño ambiental de incidencia colectiva, o el estudio de la Situación Ambiental Inicial (SAI), asuntos que convirtieron el SAO en una herramienta de gestión ambiental para los Organismos de Control de esa actividad.
La definición señalada contempló la contratación de profesionales especializados para garantizar la suficiencia de la empresa en los nichos definidos como objetivo.
– ¿Por qué Prudencia es una compañía referente en Responsabilidad Civil Profesional, en especial de la actividad médica?
– Prudencia es la primera empresa del mercado asegurador argentino que luego de la crisis de cobertura en que se encontró el sector de la salud, a fines del año 2001, por la carencia de aseguradoras, comenzó a actuar en el mercado con un programa de administración de riesgos que innovó en la atención de la cobertura, aplicando un esquema de suscripción del riesgo con un cambio conceptual y operativo, basado en acciones concretas de prevención. Las principales tienen que ver con la evaluación de las instituciones médicas para el otorgamiento de la póliza, que se realiza con un criterio de administración hospitalaria y por profesionales médicos internos de Prudencia, el seguimiento y tratamiento de los incidentes denunciados, el control de los textos de los documentos médicos y la atención de los siniestros con estudios jurídicos con especialidad en la materia.
Estas acciones le posibilitaron a Prudencia constituirse en un plazo breve en una empresa referente y reconocida entre los prestadores del sector de la salud. La compañía cuenta internamente con profesionales de la medicina que conocen los riesgos de la práctica de la profesión y también de la administración de las entidades dedicadas a la actividad. Esos profesionales están en contacto y a disposición del asegurado, los 365 días del año con una línea 0800, para compartir experiencias propias y de la compañía, asesorar en las urgencias e inducir prevenciones. Adicionalmente, Prudencia acompaña y asesora al asegurado en todas las instancias de negociación y judiciales que puedan derivarse de un eventual siniestro contemplado en la póliza.
– ¿Cuáles son los principales productos que comercializa Prudencia? ¿Están incursionando en nuevas líneas de negocios y/o lanzando nuevas coberturas?
– Los principales productos que comercializa Prudencia se relacionan con los ramos en que desempeña la actividad principal de suscripción, que para el sistema de salud se vinculan con mayor importancia con las coberturas de responsabilidad civil profesional para los médicos individuales o las instituciones, biólogos, enfermeras, estudios, prácticas y otras; para otras profesiones tienen relevancia las pólizas para los Colegios de arquitectos, abogados o contadores.
Las pólizas comprensivas de la responsabilidad civil, concentran el mayor primaje de la RC general.
La cobertura de los riesgos ambientales merece una mención especial. En este riesgo hemos tomado la iniciativa con la aprobación del Seguro Ambiental Obligatorio; el Seguro de Recomposición del Daño Ambiental y la Responsabilidad Civil por Contaminación.
En el ramo Caución, Prudencia es un actor activo del mismo que ha mantenido un crecimiento constante en los últimos ejercicios y que sin ser una compañía monorrámica está entre las primeras aseguradoras del ramo en el mercado.
En Automotores se ha procurado realizar una selección de la suscripción, que no siempre es sinónimo de buenos resultados. No obstante, creo muy interesante resaltar que se logró generar una importante participación en la gestión administrativa a través de la página web, donde la emisión -por medio de ese instrumento digital- alcanza un 90%.
Las nuevas coberturas en las que se ha incursionado no representan un porcentaje relevante del total del ramo, pero responden a necesidades de quienes quieren preservar sus bienes o sus responsabilidades, como es el caso del armado de coberturas, en exclusividad, del pack de riesgos para quienes realizan actividades náuticas (powerkiting, kitesurfing y snowkiting) o la combinación de coberturas para atender los requerimiento que se recibieron por el uso de las bicicletas y la RC para Magistrados y Funcionarios de la Justicia.
– Como compañía pionera e innovadora en la cobertura de los riesgos ambientales en la República Argentina, ¿qué es y en qué consiste el Pack Ambiental?
– La Argentina está a la vanguardia entre los países que dispusieron una eficiente gestión pública para garantizar el derecho de los habitantes de la Nación a gozar de un ambiente sano y también el deber de remediarlo a quienes lo contaminan. Así lo establece la Constitución Nacional en su artículo 41, manda que le da sólido fundamento al Seguro Ambiental Obligatorio (SAO), que es la principal cobertura para resaltar en respuesta a la pregunta sobre el pack ambiental
Este artículo 41 recoge los conceptos de los acuerdos internacionales suscriptos por la Argentina en la materia ambiental. En particular define que «el daño ambiental generará prioritariamente la obligación de recomponer, según lo establezca la ley» y que «corresponde a la Nación dictar las normas que contengan los presupuestos mínimos de protección, y a las provincias, las necesarias para complementarlas, sin que aquéllas alteren las jurisdicciones locales».
El espíritu del legislador, así interpretado en toda la normativa asociada, apunta a asegurar que la eventual contaminación a los bienes de incidencia colectiva -el agua y la tierra- provocada en procesos productivos, sea remediada por los propios responsables de su comisión. Esto implica la internalización del costo por parte de los responsables y la consecuente liberación al Estado de afrontarlo con dineros públicos.
La reglamentación del artículo constitucional fue dictada en el año 2002 por la Ley 25.675, conocida como Ley General de Ambiente, cuyo artículo 22 estableció que «toda persona física o jurídica, pública o privada, que realice actividades riesgosas para el ambiente, los ecosistemas y sus elementos constitutivos deberá contratar un seguro de cobertura con entidad suficiente para garantizar el financiamiento de la recomposición del daño que en su tipo pudiere producir».
Luego, en el Artículo 27 también se define al daño ambiental de incidencia colectiva como «toda alteración relevante que modifique negativamente el ambiente, sus recursos, el equilibrio de los ecosistemas, o los bienes o valores colectivos»; seguidamente, en el artículo 28 puntualiza que «el que cause el daño ambiental será objetivamente responsable de su restablecimiento al estado anterior a su producción».
Esta Ley rige en todo el país pero sus contenidos son presupuestos mínimos de protección ambiental a partir de los cuales provincias y municipios tienen facultades para establecer, mediante normas complementarias, la forma de implementar la exigibilidad y fijar obligaciones adicionales o más estrictas de ser necesario.
Las actividades riesgosas para el ambiente alcanzadas por la obligación de contratar el SAO fueron definidas y calificadas por la Secretaría de Ambiente y Desarrollo Sustentable (SAyDS) mediante una resolución, donde fueron divididas en tres categorías, según el Nivel de Complejidad Ambiental (NCA) y riesgo ambiental.
También dispuso de otras normas operativas para contratar este seguro, como el sistema para la fijación de los montos mínimos asegurables y, a su vez, se precisó que la cobertura se limitará a los daños de incidencia colectiva irrogados al ambiente.
El pack ambiental incluye otras coberturas que, en estos casos, no son obligatorias: una póliza de Responsabilidad Civil por contaminación, que exime al asegurado de exposición económica ante reclamos de terceros que pueda estar obligado a pagar como consecuencia de su actividad; la póliza que cubre la responsabilidad de los Directores y Gerentes ante eventuales reclamos que reciban por el ejercicio de su desempeño en el tema ambiental en las empresas aseguradas, y finalmente otra cobertura es la del Seguro de Recomposición de Daño Ambiental que posibilita amparar los costos de una remediación de una sociedad asegurada.
– ¿Cuáles son las características y los alcances de la Garantía de Remediación Ambiental?
– La Garantía de Remediación Ambiental fue instrumentada a través de un seguro de caución obligatorio, el SAO, aprobado en octubre del año 2008 por la SAyDS y la Superintendencia de Seguros de la Nación (SSN) para dar cumplimiento a la exigencia de remediar un daño ambiental de incidencia colectiva.
En la operación intervienen tres factores: primero, el sujeto obligado a la contratación por el riesgo implícito en su operación (por ejemplo, una planta industrial); en segundo lugar, la compañía aseguradora, que extiende la garantía a favor del Estado; y en tercer orden, el Estado, como beneficiario de la garantía ya que los bienes cubiertos por la póliza son de propiedad colectiva y objeto de protección jurídica: el ambiente.
En su carácter de beneficiario, es el propio Estado el que debe determinar la remediación del ambiente no bien toma conocimiento de la existencia de un siniestro o de un proceso de siniestro en ciernes. Por eso se afirma que el SAO es una herramienta de gestión de política ambiental del Estado. En la eventualidad del siniestro, el sujeto obligado debe proveer la remediación de forma inmediata por sus propios medios; si no lo hace, se acciona la garantía, siendo la compañía aseguradora la que debe ejecutar la remediación de forma inmediata.
La póliza cumple una doble función: garantizar al Estado la recomposición del daño ambiental ocasionado por las actividades productivas ante el supuesto del incumplimiento del sujeto obligado a hacerlo; y posibilitar así que el Estado deje de solventar con el erario público el costo de la recomposición del daño al ambiente.
Es indudable que el legislador, en el diseño de la ley, se refugió en la función institucional del seguro, que es proporcionar certidumbre, como un factor determinante para establecer la exigencia aludida de la cobertura del riesgo, y, de este modo, lograr seguridad en el cumplimiento de la normativa.
Una particularidad o característica de la Caución por Daño Ambiental de Incidencia Colectiva es la participación como back up de las empresas de remediación ambiental que cuentan con expertise relacionado con el tipo de riesgo que presenta el sujeto obligado.
Las remediadoras permiten además a las aseguradoras obtener el Certificado Ambiental necesario para ser autorizadas a suscribir el SAO. El criterio aplicado para que el remediador integre la póliza es que el siniestro ambiental no admite demoras para combatirlo y remediarlo. Por ese motivo la compañía aseguradora tiene acuerdos contractuales con la empresa remediadora que comprometen su intervención inmediata en caso de ser necesaria.
Las empresas dedicadas a la remediación medioambiental realizan el tratamiento profesional de los residuos peligrosos, tanto industriales como patogénicos.
La remediación del medioambiente es una disciplina aún reciente en Argentina, y prácticamente su forma de actuar es desconocida por la mayoría de las personas. Surgió como proveedor crucial de la industria con la sanción de la Ley Nº 24.051, de Residuos Peligrosos, promulgada el 8 de enero de 1992, que impone obligaciones a los generadores, a los manipuladores, y a los transportistas de residuos peligrosos tendientes a disminuir la cantidad de desechos contaminantes que se generan y los responsabiliza por cualquier daño al medio ambiente que ellos produzcan.
Antes, los desechos industriales y de todo tipo se arrojaban al ambiente, contaminando cursos de agua y suelos. Es cierto que no existía tecnología para su tratamiento, como tampoco una desarrollada conciencia del cuidado del planeta. Fue entonces, a partir de la Ley de Residuos Peligrosos, cuando se inició un proceso de cambio en el cual, paulatinamente, las empresas se fueron incorporando a la práctica del cuidado y tratamiento del medioambiente.
– ¿Qué rol ocupa el Productor Asesor de Seguros en la estructura comercial de la compañía y cuáles son los principales servicios que Prudencia le brinda?
– Ocupa un rol central en la estrategia comercial porque es el experto en comercialización que está en contacto con el mercado, el que nos traslada las nuevas inquietudes y conflictos, y que nos permite multiplicar nuestra presencia e incidencia en todas las jurisdicciones del país. Prudencia le facilita al productor capacitación y asesoramiento permanente a través de cursos programados y exposiciones sobre el manejo de riesgos, contrataciones, y garantías estructuradas para respaldar tanto a grandes como a pequeñas y medianas empresas. El productor asesor dispone en Prudencia de un recurso informático amigable que facilita la negociación con el asegurado, la cotización de ciertos riesgos, la emisión directa en automotores y la atención de siniestros y reclamo de terceros.
Actualmente Prudencia tiene una extensa red de comercialización que abarca la atención de la compañía en casi todas las provincias del país para los riesgos en que actúa, con un plantel de más de 2500 asesores productores activos, destacándose la suscripción realizada en provincias como Neuquén, Santa Fe, Salta, Entre Ríos, Tucumán, Córdoba, Buenos Aires y Ciudad de Buenos Aires.
– ¿Qué importancia otorgan a la tecnología y cuáles son las principales innovaciones que han implementado en materia de aplicaciones y desarrollo web?
– La tecnología junto con el recurso humano son las herramientas principales con que cuenta una organización para potenciar su evolución. Una empresa no es más que un proyecto humano de realizaciones económicas que transcurre hacia el futuro y donde las concreciones actúan como caja de resonancia para encarar nuevos proyectos o desarrollos.
Por lo tanto, Prudencia y, por extensión, cualquier entidad de servicios que pretenda tener calificada presencia en los mercados y sustentabilidad en su actividad, deben cuidar estos dos factores. La gestión administrativa de la compañía está dotada internamente de una alta sistematización que garantiza celeridad en la operatoria interna. Tenemos un área de Sistema que se dedica al tema con la premisa de la innovación y que está en contacto con las novedades que se van produciendo en términos de aplicaciones dedicadas a la actividad aseguradora. Recientemente, hemos introducido cambios para facilitar a través de la página web el trabajo diario del productor y facilitando la labor de los mismos para trabajar en línea con las bases de datos de la compañía y los servicios de big data contratados.
– ¿Cuál es el business plan de la compañía en el corto y mediano plazo? ¿Cuál es la proyección de crecimiento para 2019?
– En un momento tan especial de la economía como el que transcurre actualmente nuestro país y un año electoral que genera incertidumbre, hace necesario concentrarse en el corto plazo y procurar consolidar la posición alcanzada en los ramos que son los pilares de la compañía.
Las proyecciones para el año 2019 que considero de interés señalar son en caución general no muy favorables, teniendo en cuenta que la meta presupuestaria del Estado de déficit cero redujo el presupuesto para obras. En las garantías ambientales ha caído la tasa de prima, y se ha relajado la exigencia del cumplimiento de la obligación, por lo que ha habido una caída en la participación de nuestro portfolio. El otro nicho que es operaciones de comercio exterior, aun no advierte el aumento de las exportaciones y han caído las importaciones. Por lo tanto, nuestro presupuesto es crecer en el año calendario un 20%. En el caso de la RC, confiamos en un mayor incremento de producción en jurisdicciones del interior del país y las perspectivas de crecimiento en prima es de un 35%, en tanto que en Automotores tenemos una expectativa de un 25%.
– ¿Qué acciones e iniciativas llevan adelante en materia de Responsabilidad Social Empresaria?
– La RSE ha crecido en la consideración interna de la compañía al punto de haberse convertido casi en un tema más, asimilable a la atención de una cobertura especializada. Prudencia desde el año 2015 realiza anualmente su Reporte de Sustentabilidad, cuya elaboración está basada en los principios del Global Reporting Initiative (GRI). Se ha determinado una primera matriz de grupos de interés constituida por Accionistas, Empleados y Productores-Asegurados. Y se ha consultado a esos grupos sobre diversos aspectos relacionados con la actuación de la compañía.
En una primera etapa, se dedicó al aprendizaje participando en congresos internacionales y, también de manera activa en la «Semana de la Responsabilidad Social del Mercado Asegurador Argentino», una jornada organizada por la Superintendencia de Seguros de la Nación.
En el orden social, se realizaron ayudas a los damnificados por inundaciones en las provincias de Córdoba, Entre Ríos, Santa Fe y Buenos Aires, con intervención de los empleados, y se desarrollaron acciones con las fundaciones Vivencia, Proyecto R.
Una mención especial de acción de RSE en el orden cultural lo constituyó los diversos «Concursos Fotográficos abiertos a toda la comunidad», y en materia de salud Prudencia también ha desarrollado actividades de RSE mediante el auspicio de charlas sobre prevención de VIH/Sida; la colaboración con acciones de la Cruz Roja Argentina, curso de Reanimación Cardio Pulmonar (RCP) y Vacunación antigripal a su personal.
Por último, señalo también la contribución que hacemos en el área del deporte amateur, específicamente con el apoyo al desarrollo de la práctica del hockey femenino adolescente y con la campaña de un empleado maratonista muy abocado tanto en su tarea específica en la compañía como en la práctica deportiva.
– ¿Cómo impactan la inflación y la devaluación en el negocio de seguros y qué medidas están tomando desde Prudencia para atenuar sus consecuencias?
– Ambas circunstancias son de signo negativo para la actividad. La inflación -por naturaleza- afecta la estabilidad y toda intención de corregir sus efectos vía actualización de valores retroalimenta el fenómeno y termina no siendo correctiva, porque es siempre tardía. Las primas no siempre van siguiendo el ritmo de la inflación, pero los gastos y siniestralidad sí lo hacen. Se genera infraseguro en el monto del capital asegurado de las coberturas por la falta de actualización de las sumas aseguradas reflejadas en los montos cubiertos en las pólizas.
Este es un tema que siempre debería resultar inquietante, pero el problema se agudiza con un contexto inflacionario como el que estamos viviendo actualmente en nuestro país, ya que de producirse un siniestro en los ramos patrimoniales la indemnización recibida no permitiría la reposición de los bienes siniestrados. Por otra parte, las devaluaciones bruscas de la moneda agregan un mayor grado de incertidumbre de la cifra asegurada. Con respecto a la devaluación, algunos bienes sufren directamente un aumento del valor en pesos (bienes importados o con gran componente extranjero) y otros no con la misma intensidad, con lo cual, la suma asegurada debería revisarse después de un cambio notorio en la paridad cambiaria.
Para atenuar las consecuencias de lo señalado, se hacen recomendaciones a los asesores productores, entre otras, para mantener actualizado el monto cubierto por la RC, y para que se recalcule el costo de reposición de los bienes asegurados, como mínimo, una vez al año. Para los inmuebles, ponderar el capital con el costo de reconstruir la propiedad bajo la hipótesis de una destrucción total. Igual consideración para la cobertura de los equipos médicos. Pero finalmente debo reconocer que no tenemos mucho éxito en el resultado de estas recomendaciones.
Es habitual que los asegurados erróneamente prioricen el monto de las primas que deben pagar, más que la tranquilidad de estar suficientemente cubiertos en caso de producirse un siniestro; y ante esa situación, el que más pierde es el asegurado.
En mi criterio, el tratamiento del factor inflacionario debería ser tema de tratamiento por toda la industria aseguradora de modo activo como una problemática que afecta a la imagen del seguro.