El uso de un extintor inadecuado puede agravar aún más un incendio, por lo que es fundamental conocer cuándo utilizar cada tipo de matafuego, cómo hacerlo y qué medidas tomar para conservarlo adecuadamente.
Los matafuegos o extintores son un elemento esencial para la seguridad ya que sirven para aplacar diferentes tipos de fuego de manera segura y confiable. Dada su importancia, el equipo de La Perseverancia Seguros -compañía líder en el país, con más de 116 años de trayectoria- comparte información sobre las distintas clases de fuego -según sus orígenes- los distintos tipos de extintores, cómo utilizarlos y qué medidas tomar para conservarlo adecuadamente.
En primer lugar, es fundamental reconocer el origen del fuego, para luego poder elegir uno de los 6 tipos distintos de matafuegos que existen:
- Matafuegos clasificado como “A”: extintores de agua. Se utilizan para combatir el fuego de materiales combustibles sólidos.
- Aquellos clasificados como “A B”: extintores de espuma. Se utilizan para combatir el fuego de líquidos combustibles o gases. No deben usarse en fuegos de equipos eléctricos.
- “B C”: extintores de dióxido de carbono. Se utilizan para combatir el fuego de equipos eléctricos de baja tensión.
- “A B C”: extintores de polvo químico seco y extintores a base de productos halogenados. Se utilizan para combatir el fuego de materiales combustibles sólidos, de líquidos combustibles o gases, o de equipos eléctricos de baja tensión.
- “K”: Se utilizan para combatir el fuego de aceites vegetales o grasas animales.
- “D”: Se utilizan para combatir el fuego de ciertos metales combustibles.
Una vez elegido el matafuegos indicado, ¿Cómo utilizarlo correctamente?
- Quitar el pasador que traba el gatillo, girándolo y rompiendo el precinto.
- Colocarse a una distancia aproximada de 3 metros del fuego y apuntar la boquilla del extintor hacia la base de las llamas.
- Apretar el gatillo, manteniendo siempre el extintor en posición vertical.
- Mover la boquilla de lado a lado cubriendo el área del fuego.
Cuidados y mantenimiento
Los extintores no deben tener desgastes, óxido o fugas, y deben ubicarse en lugares de fácil alcance. Es importante que las instrucciones de uso sean legibles y que el matafuegos tenga la presión adecuada para su correcto funcionamiento. Cada tres meses debe realizarse una inspección visual, cada un año debe recargarse el extintor, y cada cinco años debe llevarse a cabo una prueba hidráulica.
Matafuegos en automóviles
Según la Ley 2894, todas las unidades deben estar provistas de extintores de incendio. Deben estar ubicados al alcance del conductor, en un lugar que no represente un riesgo para el mismo o para su acompañante. El extintor debe fijarse de forma tal que no pueda desprenderse, y no debe colocarse sobre los parantes del techo del auto. La ley prohíbe utilizar un sistema de abrazadera elástica para sujetar el extintor.
“Como parte de nuestro compromiso con la comunidad, es nuestro deber informar sobre las especificidades de los extintores para disminuir los riesgos en casos de incendio”, comenta Adalberto Bruzzone, director de La Perseverancia Seguros, y agrega “recomendamos contar con un seguro contra incendios tanto en los hogares como también en los lugares de trabajo y los automóviles”.