La función de Aeropuertos Argentina 2000 es operar, realizar infraestructura y mantenerla, pero no tiene responsabilidades sobre las cuestiones aéreas, tampoco sobre la seguridad, ni sobre la seguridad aérea y el otorgamiento de rutas, así como tampoco sobre el control de tráfico aéreo. Se trata de una empresa absolutamente sana, con una economía fuerte y una EBITDA (Earnings Before Interest, Taxes, Depreciation, and Amortization) muy importante, que está para seguir creciendo. El año pasado triplicó la inversión comprometida y este año va camino a sextuplicarla. Hoy opera 33 aeropuertos en el país y 25 en el mundo. En entrevista exclusiva con Informe, Matías Patanian nos cuenta su trayectoria, su relación con el deporte y la experiencia como vicepresidente de River Plate.
Matías Patanian, Chief Executive Officer (CEO) de Aeropuertos Argentina 2000, analiza el presente y la proyección de la compañía.
– ¿Cuál es su trayectoria en el ámbito empresarial que lo lleva a ocupar el cargo de CEO de Aeropuertos Argentina 2000 en el año 2013?
– Hace 26 años que estoy en el grupo Eurnekian, y desde octubre 2013 como CEO de Aeropuertos Argentina 2000. Empecé a trabajar con Eduardo cuando tenía 21 años. Es multifácetico estar en este grupo porque en este mismo edificio existía la textil y, a la vez, empezó a conformarse lo que fue Corporación América, que era un conglomerado de grupos de medios. Entonces, uno salía de «tres rollos de tela» a cruzarse con Mario Pergolini o, en su momento, César Luis Menotti porque habíamos empezado a desarrollar el deporte. En el año 1991, Eurnekian compra América 2, es decir, el Canal 2 que luego se transformó en América 2, así que el trabajo fue multifácetico, donde quizás por la mañana hacía una cosa y por la tarde, otra. Estudié Comercio Exterior, donde en ese momento era muy fuerte el tema de importación-exportación. Entonces, aplicaba un poco lo que venía estudiando pero, al mismo tiempo, se empezaba a crear la necesidad de ocupar lugares en las distintas áreas de programación y producción en el canal. Había una productora de contenidos para Cablevisión que se llamaba Pramer, así que era todo muy entretenido. En el año 1994, me volqué directamente a la producción deportiva. Años más tarde, enlazo ahí con River. En ese momento, Eduardo decide que América, teniendo que competir contra un canal como El Trece y otro como Telefé -que eran «los tanques»-, necesitaba sacudir su pantalla con productos innovadores y en vivo. De ahí surgen CQC, «Viva la diferencia», el mismo Lanata, y deportes. El deporte podía competir con «los tanques», así que nos metimos mucho en el mercado deportivo. Menotti vino como director de Deportes y, trabajando a su lado, empezamos con la compra de derechos para que América tuviera material deportivo. Y a través de los eventos deportivos, empecé a promocionar al canal. Entonces, a través de unas animaciones con «unos cubitos» -que fue la primera vez que se hizo- mientras jugaba River o Boca en la pantalla de América, ahí se empezó a promocionar a Moria Casán o Andrea Frigerio. Esto fue parte siempre de la genialidad de Eduardo Eurnekian, así que me tocó vivir esa tapa. Si bien los medios son mi hobby, ahora estamos alejados porque el grupo se desinteresó del tema medios entre el 2000 y 2001. En el año 1998 se dio la licitación de Aeropuertos 2000, entonces en el grupo de alguna manera quedó quienes todavía estábamos en los medios y resistimos un poco más, a ya después armar toda la estructura de Aeropuertos Argentina 2000, cuya concesión ya lleva 20 años.
– ¿Cómo impacta el ingreso de las aerolíneas Low Cost en el negocio aerocomercial?
– Lejos de afectar, todo lo que lleve a tener más tráfico para nosotros, es bienvenido. La realidad es que estamos en condiciones de recibir a las low cost y, en ese sentido, el gobierno tiene un postulado de triplicar el tráfico doméstico en Argentina que, en comparación con otros países de la región, es bajo a nivel promedio por persona. Como operadores, acompañamos, estamos preparados y también estamos en medio de un plan que Dietrich siempre puntualiza de la «revolución de los aviones», y desde la infraestructura estamos acompañando. De hecho, esta es una concesión que, como todas, tiene un fuerte compromiso de inversión de entrada, después se estabiliza y a medida que va terminando, las inversiones bajan por una cuestión matemática. El año pasado triplicamos la inversión comprometida, ya que tenemos por contrato una cifra ‘equis’ de inversión; el año pasado la triplicamos y este año vamos rumbo a sextuplicarla.
– ¿En qué plazo recuperan dicha inversión?
– Eso forma parte de una ecuación muy larga y difícil de explicar, pero apostamos básicamente a acompañar el crecimiento que el gobierno plantea.
– En estos 20 años de crecimiento de Aeropuertos Argentina 2000, ¿cómo se sitúa hoy la empresa frente al mundo?
– Aeropuertos Argentina 2000 es una empresa que creció en Argentina y, de alguna manera, exportó el know how a las diferentes concesiones que hoy tenemos, porque como empresa argentina tiene 33 aeropuertos, pero en el resto del mundo, ya no con la marca Aeropuertos 2000 -porque es específica para operar los aeropuertos en Argentina- tenemos 25 aeropuertos más, con lo cual, a nivel de cantidad, somos el operador que más aeropuertos opera en el mundo. También está imbuido en las economías del mundo donde, por ejemplo, hoy los uruguayos sienten mucho orgullo por la terminal que fue realizada por el arquitecto Rafael Viñoly, la cual se convirtió en todo un símbolo. Los armenios tienen un aeropuerto para el futuro más que para el presente. Guayaquil es una terminal que también ha recibido premios. Brasilia y Natal -que se inauguró en 2014 para el mundial- también son otros ejemplos. Y en Argentina, el cambio de Aeroparque está a la vista, y va a seguir cambiando; mientras que en Ezeiza en el año 2000 inauguramos la terminal A, hace tres o cuatro años inauguramos la terminal C, y actualmente estamos en un proceso de transformación de Ezeiza que ya empezó y que va a llevar los próximos tres o cuatro años.
– ¿Proyectan expandirse a otros países?
– Siempre estamos atentos y alertas. Si bien todavía no hay un proyecto firme, siempre aparecen licitaciones y somos un actor que participa.
– ¿Qué rol juega el Estado nacional en su carácter de accionista? ¿Cómo es la relación a partir del cambio de gobierno?
– El Estado participa matricialmente de dos maneras; en primer lugar, teniendo el 15% de las acciones. Esto le permite tener dos directores en el directorio. Pero a la vez, como toda concesión tiene un organismo regulador, que también controla y regula todas tus actividades, con lo cual, no se trata solamente de ese 15%, sino que en la vida del día a día la interacción es mucho más grande. Este es un gobierno que está muy encima a través de la impronta que Dietrich le ha querido dar a su ministerio, y Aeropuertos Argentina 2000 está dentro de su ejido por más que sea una empresa privada, y además es un ministro que está muy presente y bastante finito en cada detalle, así que la interacción es casi diaria.
La gestión anterior también estaba muy encima aunque yo creo que más teñida de cuestiones ideológicas, habida cuenta que había un sector muy característico del anterior gobierno que, de alguna manera, se apoderó del mercado aerocomercial teniendo presencia en Aerolíneas, Intercargo, en el organismo regulador, etc., y veo que era una cuestión más ideológica.
– ¿Cuál considera que es la fortaleza y la debilidad de Aeropuertos Argentina 2000?
– Una fortaleza está dada porque es una empresa que está permanentemente haciendo obras, lo cual se puede ver. Hoy tenemos obras lanzadas en San Juan, Jujuy; el presidente Macri inauguró la terminal de Córdoba y de Mendoza, inauguró la pista de Mendoza y de Tucumán. Por lo tanto, permanentemente estamos en funcionamiento y haciendo cosas.
Una debilidad es que a nivel servicio, uno tiene que interactuar y, muchas veces, depender y estar a expensas de funcionamientos que no dependen de uno. Por ejemplo, Aduana, Migraciones, Policía, Intercargo, etc. Esto no quiere decir que nosotros trabajemos bien y ellos mal, sino simplemente que cualquier desajuste que se produzca en alguno de estos servicios, afecta al pasajero y ante cualquier situación que lo afecte, éste no discierne si es falta de gente en las cabinas, sino que «es Aeropuertos Argentina 2000», entonces siempre estamos a expensas de cualquier crítica, que a veces la merecemos y otras veces es producto de fallas en otros sistemas. De todas maneras, hoy hay un muy buen diálogo con todos y entre todos tratamos de mejorar el servicio. Es algo que este gobierno hace mucho y no tiene la experiencia «cliente»; nosotros estamos trabajando fuertemente en esto, con mejoras rápidas que el pasajero vea y tenga a mano.
– ¿Dónde empieza y termina la responsabilidad de Aeropuertos Argentina 2000?
– Aeropuertos tiene que operar, realizar infraestructura y mantenerla, pero no tiene responsabilidades sobre las cuestiones aéreas, tampoco sobre la seguridad, ni sobre la seguridad aérea y el otorgamiento de rutas, ni tampoco sobre el control de tráfico aéreo. A veces la gente no lo sabe, y por eso hay funciones que están bien delimitadas.
– ¿Con este nuevo gobierno considera que existen más oportunidades de negocios en el sector aerocomercial?
– Creo que hay mayores perspectivas de negocios en general, más allá de aeropuertos. Si hoy estamos viendo que hay muchas más compañías que tienen ganas de volar en Argentina, esto obviamente está bueno para nosotros. En general, veo que Argentina se abrió al mundo y esto trae mayores perspectivas en general donde la industria aeronáutica es una más.
– ¿Cómo compatibiliza el mundo de los aeropuertos con la vicepresidencia de River?
– Necesitando días de treinta horas. Es muy difícil. Fueron cuatro años de River que están concluyendo ahora, porque esto arrancó en diciembre de 2013 y yo justo asumí como CEO en octubre de 2013, así que estos cuatro años coincidieron. Anteriormente, no era CEO de Aeropuertos y en River estuve entre 2009 y 2013 como directivo por la minoría, ya que perdimos una elección muy reñida con Passarella, y como River tiene mayorías y minorías, entonces quienes estábamos en cierta posición en la lista nos quedamos. Lamentablemente, me tocó ser oposición -me hubiera gustado ser minoría- durante el gobierno nefasto de Passarella en River, lo cual me llevó también a un gran desgaste. Hoy tengo acumulados 8 años y también es por esto que el año que viene no voy a estar en la fórmula, porque también necesito despejar un poco la cabeza.
– ¿Por este motivo no se presenta para la reelección junto a Donofrio?
– No voy en la lista porque ya llevo dos períodos. Uno en River puede estar solamente tres períodos por una cuestión estatutaria. Yo llevo dos pero la verdad es que es complicado. En principio, voy a descansar por el día a día de acá y porque ser vicepresidente te lleva a tener obligaciones protocolares y formales donde uno tiene mesa directiva, mesa financiera, reuniones de bloque, que te obligan a estar si no todos los días en el club, bastante cerca. Y hoy por hoy, no me puedo dar ese lujo. Lo hice como pude, de la mejor manera, pero ya con un costo físico y de estrés demasiado alto.
– De la gestión de Passarella a la actualidad, ¿cuál es la situación financiera de River?
– Voy a responder con un ejemplo que va a explicar todo. Cuando nosotros asumíamos, le preguntaban al presidente cuándo se iba a convocar River. Cuatro años después, a esta misma altura, nos preguntan si vamos a reformar el estadio. Creo que esto marca cómo River se transformó en estos cuatro años.
– ¿En el nuevo período de gestión que comienza en River está garantizada la continuidad de Marcelo Gallardo y de Enzo Francescoli, así como la renovación de sus contratos?
– La continuidad de los dos, y para nosotros es muy bueno porque Enzo es una persona clave en la relación entre dirigentes, cuerpo técnico y plantel. Se trata de un pivote muy importante y, además, ha sido quien nos recomendó Gallardo. Así que, está garantizada y además, Marcelo ya lo hizo público. Si este proyecto gana, porque no hay que olvidarse que hay elecciones, vamos a continuar con ellos. Gallardo ha señalado que tiene ganas de seguir en River, más allá de quién gane, lo cual me parece bien y una cuestión de sanidad que él no se involucre en el proceso eleccionario. Gane quién gane está bueno que siga Marcelo.
– ¿Cuál es su análisis sobre la Selección Argentina de cara al Mundial de Rusia 2018?
– Tuvo un proceso bastante traumático. Ahora, conseguida la clasificación, creo que se va a liberar y el técnico va a poder trabajar con cierta tranquilidad de acá al mundial, cosa que no había podido hacer hasta ahora, porque apenas asumió tuvo que competir. Me parece que Argentina va a ser un muy buen protagonista. Deseo profundamente que -a mi juicio- el mejor jugador de la historia del fútbol gane un mundial, así algunos que hablan -y hasta incluso que le desean que fracase- se callen para siempre.
– ¿Qué injerencia tiene hoy River en la AFA?
– No tiene injerencia y no forma parte del Comité Ejecutivo. River eligió en su momento otro modelo, el cual después por diferentes razones no llegó. En cambio, llegó un grupo político que consiguió los votos y hoy lo que puede hacer es lo mismo que nosotros le pedíamos al mundo cuando asumimos en River: «Déjennos un año para luego empezar a evaluarnos», entonces todavía está transcurriendo un año de esta nueva conducción. Lo mejor que puede hacer River es callar y dejar que trabajen. Y por supuesto, colaborar cuando sea necesario.
– ¿Cuál es la principal asignatura pendiente con Aeropuertos Argentina 2000?
– Mi asignatura pendiente personal, sobre todo en gran parte del gobierno anterior, fue poder trabajar más en la gestión día a día, y no tanto en la cuestión política hacia el exterior que, a la postre, terminó prevaleciendo en mayor porcentaje de horas del día versus mirar un poquito más hacia adentro y mejorar algunos procesos. La cuestión externa fue tan fuerte que obligó a que uno esté mirando más hacia afuera que hacia adentro. Con ‘externa’ me refiero a cuestiones de gobierno, amenazas o de defensa.
– ¿Cuál es la situación financiera de Aeropuertos Argentina 2000?
– Es una empresa absolutamente sana. Insisto que no son muchas las empresas que hoy pueden provocar que el presidente de la nación venga a inaugurar tres obras en un año. Se trata de una economía fuerte con una EBITDA (Earnings Before Interest, Taxes, Depreciation, and Amortization) muy importante y está para seguir creciendo, así que en ese sentido, estamos muy orgullosos, porque de aquel proceso privatizador, creo que ésta es de las únicas que quedó en pie, sana y funcionando.
– ¿Cómo se posiciona Argentina en materia de calidad, infraestructura e innovación aeroportuaria en comparación con otros países?
– Hay aeropuertos en los cuales el operador toma todo tipo de funciones y puede gestionar de la manera que crea conveniente. En este caso, nosotros estamos acotados porque gran parte de los otros servicios están en manos del Estado pero, en definitiva, más allá de cuestiones contractuales, hay diferentes estilos de contratos. Aquí en Argentina hay un estilo de contrato tal vez más regulado, mientras que en el resto del mundo existen contratos más de riesgo empresario. En ese sentido, tenemos flexibilidad para trabajar con cualquiera de los modelos. El de Argentina está planteado así porque el contrato argentino es el que contempla el sistema nacional aeroportuario y en cuanto a los aeropuertos del grupo A, que son los nuestros, es un sistema de subsidios cruzados. Hubiera sido muy difícil que cada provincia administre su aeropuerto porque existe una serie bastante grande de aeropuertos deficitarios. Entonces, con la tasa que cobramos en Ezeiza subsidiamos todo el sistema, es decir, el resto de los aeropuertos del país, porque existen aeropuertos que tienen un vuelo por día, otros que no tienen vuelos y algunos que tienen dos vuelos por semana. De modo que, esos aeropuertos por sí solos como unidades no podrían mantenerse si no estuvieran inmersos en un sistema de subsidios cruzados, que hoy nos permite mantener y hacer obras en aeropuertos importantes del país, pero donde el retorno de esa inversión jamás lo vas a ver si no estuvieras inmerso en un sistema. Sería imposible de hacer.
– ¿Con qué compañía se asegura Aeropuertos Argentina 2000?
– Hoy el broker es Aon y los reaseguros están en Londres. Acá tenemos varias compañías como Meridional, Experta en el caso de ART, etc. Hoy tenemos en total 2200 personas trabajando en Aeropuertos Argentina 2000, también tenemos la terminal de carga que hoy se llama TCA (Terminal de Cargas Argentina). La Corporación tiene los aeropuertos en el exterior que mencionamos antes, negocios de biodiésel, de exploración y explotación petrolera, de explotación ganadera, de nanotecnología, de construcción, y en ciernes el negocio de banca digital. En total, el grupo tiene 10 mil personas.